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Luciano Troncoso
Jefe de Proyecto y KAM
Gerencia de Ingeniería

01 de febrero de 2022

Mucho se ha escrito sobre los efectos del Covid-19 a nivel psicológico, social y económico, consecuencias que parecieran aún estar lejos de terminar por la continua mutación del virus.  Es en este contexto, que luego de 21 meses de pandemia, las actividades de una empresa de ingeniería siguen sin estar exentas de este impacto.

Por una parte, históricamente hemos tenido la convicción de que técnicas como la coubicación, en que los miembros del equipo de proyectos se ubican físicamente en el mismo sitio, permiten mejorar la comunicación, las relaciones laborales y la productividad. Es así como hemos desarrollado, en torno a este concepto, nuestras oficinas y espacios de trabajo a lo largo de toda nuestra trayectoria de más de 27 años.

Por otra parte, ante la aparición de la pandemia a inicios del 2020, nos vimos obligados a trasladar nuestros equipos de trabajo a las casas, comenzando a utilizar el teletrabajo como medida de solución para mantener nuestras actividades y cuidar la salud.

Si bien pudimos adaptarnos rápidamente al teletrabajo y mantuvimos activos y vigentes equipos de proyectos de diversos tamaños, sin alterar, de manera relevante, nuestra eficiencia y productividad, no podemos negar que las relaciones laborales si se vieron afectadas al perder esos espacios comunes para la comunicación cotidiana, tanto formal como informal.

Tuvimos que dejar atrás el recibir y compartir lecciones aprendidas, conversaciones de café que, de una manera intangible, traspasaban la identidad de nuestra cultura entre diversas generaciones, y tantas otras experiencias valiosas para todos.

Es así como los integrantes de los equipos de trabajo debieron usar sus mejores condiciones y fortalezas, de una manera que nunca habían sido requeridas, compatibilizando el tiempo entre el trabajo y la vida personal, manteniendo los altos estándares y una comunicación permanente por medio de los recursos tecnológicos.

Por otra parte, los lideres tuvimos una tarea relevante sosteniendo y conteniendo a nuestros equipos en momentos complejos para todos, sin perder el liderazgo técnico habitual sobre los proyectos y las relaciones con nuestros clientes.

Con la finalidad de buscar capturar las oportunidades que típicamente generan los problemas y manteniendo una dosis importante de optimismo en nuestra mirada hacia el futuro, es que Pares&Alvarez decidió tomar lo mejor de las dos condiciones, la coubicación y el teletrabajo, e implementar un sistema hibrido.

Estamos todos invitados a generar los cambios necesarios para tomar aquellas oportunidades, sin perder de vista que los desafíos de las nuevas condiciones no cesan y que debemos mantenernos alerta a las posibles amenazas y respetar en todo momento las recomendaciones sanitarias.